jueves, 4 de octubre de 2012

JM

"Lo que hace que concibamos amor es la belleza. La belleza aquí no existe en estado puro. Lo que conocemos sólo posee un reflejo de esa Belleza.
...Como en un espejo, viste una belleza, que solo era un espejismo...
Sin embargo, existe, es real y no la has perdido, sólo has perdido el espejo donde la viste. De momento la intuyes y llegaras a estar más de cerca de lo que nunca soñaste. 

Sabes a menudo me recuerdas a mi hija Teresa (la empollona), eso me resulta a la vez entrañable y escalofriante.
Las dos tenéis los ojos muy grandes...
Las dos sois muy inteligentes...
Las dos sois pelín más susceptibles que la media...
Hay mucho más...
Una sonrisa,

JM
"

No sabía como comenzar esto, no lo sé, quizás contando porqué durante un mes he andado entre cabreada y deprimida, pero creo que eso ya ha quedado muy claro, ahora bien cada vez me cabreo más pero conmigo misma, invertí un esfuerzo ímprobo en alguien que no se lo merecía, en animarlo y consolarlo cuando pensaba que estaba pasando un mal trago y desatendí a alguien que lo único que ha tenido siempre para conmigo ha sido bondad. Y él si que ha necesitado mis ánimos durante meses.
Esta última persona, me comentó en este blog durante mucho tiempo, pero desde hace algún tiempo ya no lo hace, le cuesta leer y escribir, le cuesta andar, le cuesta seguir con vida, ¡Que poco caso te he hecho!.
Siempre dijiste cosas que nadie dijo de mi, ¡Me mandabas unas misivas tan bonitas!, la última vez que hablamos cuando aún estabas en teoría bien, me dijiste que te habías caído de la moto "¡En que andabas pensando!" Te dije yo, tu solo sonreíste, con esa sonrisa entre tierna, dulce e inocente que siempre te ha caracterizado, ya ves no sólo yo soy inocente "Esos grandes ojos tuyos siguen contemplando el mundo con una inocencia que para mí quisiera, envidio esa capacidad de asombrarte ante la vida misma", porque esto me lo escribiste tu, en uno de esos días que tu ánimo estaba cansado. ¡No sabes lo que te voy a echar de menos!
Cuando te llamé el martes yo no creí que era tan grave, habíamos hablado tras la operación y a principios de junio, pero no me dijiste la gravedad del tumor... "Un tumor en el lóbulo frontal", tenías que volver a aprender a leer y ahora sé que andar... Y habrá gente que se preguntará ¿Para qué? Para vivir, para vivir lo poco que te queda como siempre lo has vivido, con absoluta curiosidad por todo, con absoluta curiosidad por la vida. ¿Sabes?, te contaré un secreto: Eres mi ídolo, eres lo que yo quise ser, hiciste lo que yo quería hacer... ¡Me diste siempre una envidia! Profesor en una prestigiosa universidad extranjera y en alguna nacional, científico de probado prestigio, profesional ampliamente reconocido,  feliz padre, orgulloso de sus hijos, hijo ejemplar... ¿Como era aquello que decía tu padre? "Las cosas hechas con prisa siempre salen mal" y tu sabes la razón que tenía. Como decía antes, el martes no dijiste nada, pero hoy cuando ha llegado tu correo electrónico, triste pero con esperanza y con tu absoluta resolución de dejar todo resuelto, me he venido abajo.  ¿Es forma de decirle alguien esto así?  "En el mejor de los casos tengo un 10% de posibilidades de llegar a fin de año"... ¿Y en el peor? ¡Ya te estoy riñendo otra vez!, si estuviésemos frente a frente de reirías, y otra vez saldría esa sonrisilla que a mi tanto me gusta.
Voy a  ir a verte, espero llegar a tiempo, nos despediremos como Dios manda, no lloraremos, nos reiremos mucho, yo te contaré cosas de esas que me pasan a mi y con las que tu te ríes, no será trágico, no lo será porque mi corazón y tu orgullo no se lo pueden permitir. Y ya sabes la muerte no es más que una joven y hermosa doncella que vendrá a buscarte y te sonreirá y posiblemente la confundas con tu amada... O a lo mejor se transforma en  la luna llena esa que tanto te gusta y que yo ya no podré contemplar desde tu cabaña de la sierra Madrileña en tan buena compañía.
Sé que no podrás leer esto, te fatiga demasiado leer, pero desde aquí te hago una promesa, siempre que mire "Esa luna opalina" pensaré en ti.
¡Ah! Nunca, nunca me defraudaste...JAMÁS 




10 comentarios:

  1. Lo siento, no se me ocurre nada más. Solo deseo que si tiene que ser sea rápido y indoloro, y la doncella se lo lleve en medio de un sueño.
    Un beso

    ResponderEliminar
  2. Es imposible no conmoverse. Pero mirando en positivo, JM ha alegrado la vida a su alrededor. Tu, además, puedes manifestarle todo el cariño que te inspira; aun hay tiempo. Y , por último, JM es justo contigo al decirte todas esas cosas hermosas.
    Por lo demás, lo que no está de nuestra mano, mejor no obsesionarse ni dejarse llevar de sentimientos de desesperación.

    ResponderEliminar
  3. Sabeís una cosa los dos, Lluna y Euclides en cierta ocasión vuestros comentarios se cruzaron, fue divertido... La verdad es que os habeis cruzado en esta página más de una vez, pero en aquella ocasión vosotros estabais de acuerdo conmigo y él no. Me llamó para decirme que sólo había escrito lo que sentía. Fue si no me equivoco para San Valentín... Antes de saberse enfermo me dijo que había abandonado el blog y que él se lo pasaba bien leyéndome, ahora que he sido prolifica en mis escritos, él no puede leerme.

    ResponderEliminar
  4. Joder Ana….. que asco de vida!!!!

    ResponderEliminar
  5. BB leo tu entrada y la comento y al ratito llega su mensaje, él conocía que ese era mi tema, de hecho la ha leído y no he podido por más que ponerselo en mi escrito... 'Es tan duro!

    ResponderEliminar
  6. Escribir aquí ha sido fácil, hablar con él va ha ser muy díficil.

    ResponderEliminar
  7. no sé qué decir, un lo siento es demasiado simple pero es que no sé qué decir... tal vez que por lo que cuentas él es de esas personas tan valientes que saben enfrentarse a la vida y también sabrá enfrentarse a la muerte con la misma valentía.

    biquiños,

    ResponderEliminar
  8. Espero tenga usted toda la fuerza del mundo. Le mando un largo y fuerte abrazo.

    ResponderEliminar
  9. Yo no soy valiente, pero tampoco soy cobarde, pero he tenido la suerte de conocer a varias de esas personas que se enfrentan a la muerte mirándola a los ojos... Uno de ellos, Miguel, del que escribía hace mucho tiempo, tenía miedo, no quería estar sólo pero nos dió un ejemplo de dignidad como pocos, creo que JM hará lo propio, porque lo conozco, sé que tiene miedo, pero estará mirándola y diciendo "ven a por mi no te tengo miedo, no me resistiré, pero se venébola en mi último momento"

    ResponderEliminar